Los jardines, espacios de inclusión temprana
Tu oficio, qué lindo oficio
Magia del pueblo
en las aulas.
Milagro de alfarería
sonrisa de la mañana.
Palotes, sumas y restas
tus armas son, maestrita,
ganando mansas batallas
ganándolas día a día.
Félix Luna
(Fotos Julia Leal)
La educación temprana
El 28 de mayo es El día, pero durante toda esta semana se celebra a los Jardines de Infantes. Estos centros iniciales de escolarización adquieren cada vez más relevancia como elementos importantes del proceso educativo que deben atravesar los niños. Tanto el día como la conmemoración lleva la impronta de una mujer que hace casi un siglo y medio dedicó sus esfuerzos a esta etapa temprana de la niñez y a la necesidad de formalizar una propuesta educativa.
Rosario Vera Peñaloza nació el 25 de diciembre de 1873 en el pueblo de Atiles, La Rioja, y toda su vida la dedicó a la enseñanza, fundó el primer Jardín de Infantes argentino y luego, a pedido del Consejo Nacional de Educación, trabajó en la formación del Primer Museo argentino. Falleció el 28 de mayo de 1950 y en su homenaje se instituyó este día como “Día de la Maestra Jardinera” y el “Día de los Jardines Infantes”.
En Rosario, en Tucumán y en todo el país
Los jardines son espacios de participación infantil y de socialización, formación en sentido amplio. La directora del Jardín Río Marrón de la ciudad de Rosario, Alejandra Bianciotti contó en el diario La Capital, que "ahora estamos trabajando con los derechos del niño, me parece fundamental que conozcan desde pequeños cuáles son, qué dicen. Los derechos se garantizan y para eso hay que conocerlos".
En el Hospital Eva Perón de Tucumán funciona un jardín que facilita la contención de los niños y el trabajo de sus padres (y madres). Andrea Chamorro trabaja en la institución hospitalaria y es una maestra jardinera orgullosa de su profesión. En relación a la semana de los jardines expresó que “le vamos a dar un toque especial a la semana, por eso comenzamos con el festejo del cumple de Cande, una de las niñas de la guardería y con el armado de las coronas y varitas para la fiesta de disfraces. También vamos a cocinar y a jugar se chefs. También queríamos que los chicos se expresen y hagan arte, por eso pintamos un mural, decoramos la salita e hicimos juegos en pelotero”.
El derecho a la Identidad
En el jardín Río Marrón vienen trabajando el derecho a la identidad, lo hacen con los datos que aportan las familias y sucesos cotidianos que hacen a su identidad más allá del nombre. Comidas, juegos, trabajos de los padres, todo sirve para ir narrando y construyendo versiones de sí mismos y de su entorno próximo.
Y en ese trabajo diario se van forjando, también, las identidades de las salas a las que asisten. Las salas reciben nombres, por ejemplo de pintores. Uno de los ejes que se trabajan con el nombre es el de las sensaciones: a qué huele, a qué suena, qué gusto tiene. Bianciotti contó que “para el 10 de junio haremos una muestra interactiva con las familias, vamos a hacer el mismo recorrido que hicieron sus hijos en esta primera parte del año, conociendo un poco más la identidad del jardín.
Cada vez crece más la demanda de apertura de jardines de infantes, maternales y guarderías que brinden servicios de atención y cuidado maternal a niños desde los 45 días hasta los 3 años. Esto se debe a que durante los últimos años las mujeres han aumentado su participación en el mercado laboral, y a que se viene modificando el modelo de familia tradicional que concebía una mujer ama de casa que se dedicaba de manera exclusiva al cuidado de los niños. La democratización de los roles familiares ha aumentado también la consciencia acerca de la necesidad estratégica de incorporar desde etapas bien tempranas a los niños en el sistema educativo a través de los
jardines.