Contenidos audiovisuales infantiles que reconocen a los niños
Cuando surgió el canal Paka- Paka se propuso llevar al público infantil y adolescente contenidos que promuevan y respeten los derechos de los NNyA, y temáticas que se corresponden con las memorias de nuestro país y con la historia de latinoamericana, como ser las fechas de gestas y conflictos y las historias donde nuestros pueblo pudo mostrar relatos de emancipación. Así por ejemplo, nació “Zamba” quien personifica al niño argentino de una provincia del interior del país. Un niño no porteño, de rasgos trigueños y con iniciativas alternativas a las de consumo que nos muestran las figuras caracterizadas de los grandes centros urbanos. También con Paka Paka se promovieron modelos de niños con capacidad de opinar y hacer escuchar su voz sobre los temas que les importan.
En el mercado del entretenimiento infantil predominan contenidos que no son del todo apropiados para la promoción de los derechos los chicos, ya que más que educar, divertir y entretener, forjan estereotipos sobre los niños, niñas y adolescentes que consumen este tipo de productos. Muestran más una infancia que debe adaptarse a un mercado de consumo amplio y en crecimiento constante que sujetos con una creciente capacidad de incidir y transformar el entorno donde realizan sus vidas. Los programas infantiles de los canales globales no muestran diversidad de niños, carecen de modelos infantiles basados en la participación, en iniciativas colectivas, en propuestas de aprendizaje e innovación. Además no aportan elementos que colaboren en la construcción de una identidad nacional porque provienen, en general, de Estados Unidos y Europa.
Pero ¿cómo se logra llevar a cabo estos contenidos audio-visuales? Cielo Salviolo, licenciada en ciencias de la comunicación, investigadora, y productora de contenidos infantiles pasó por Tucumán para dar una charla en el marco del Festival "Cortala" y nos dijo: “Para pensar contenidos dirigidos a la infancia es importante conocer y reconocer a los niños. Conocer es saber qué piensan, qué les gusta, cómo ven el mundo, qué les pasa a determinada edad, es un trabajo de acercarse al universo infantil, estar en contacto con los chicos. Es conocerlos como reconocerlos, es tomar una postura frente al niño, no todos pensamos de la misma manera. Conocer y reconocer son dos cosas claves para entender al niño”.
Compartimos una charla con Cielo en la que surgieron algunas reflexiones que nos pueden ayudar a pensar en nuevos contenidos para propuestas inteligentes y adaptadas a las necesidades infantiles y a la posibilidad de representar infancias activas y protagónicas en un mundo cambiante y cada más más exigente.