Del embarazo al primer año de vida, un desafío permanente
El Ministerio de Salud Pública de la provincia de Tucumán editó a fines del año pasado una Guía práctica de la salud desde el embarazo hasta los 11 años. El material, que se distribuye en centros de Salud y Hospitales, se presenta como parte de una estrategia preventiva destinada a madres y padres para facilitar un desarrollo y crecimiento sanos, desde el punto de vista de la alimentación, la higiene, la vigilancia médica, la salud de los padres, entre otros factores.
En el primer apartado, se aborda el embarazo a través de consejos pre y posparto. Las vacunas que deben colocarse las embarazadas, la importancia de los controles periódicos, y la duración de la gestación normal, que dura entre 37 y 41 semanas.
Direcciones útiles también son provistas en el capítulo, para facilitar la accesibilidad a servicios de atención en salud pública como maternidades a lo largo y ancho de la provincia.
Una exhaustiva descripción de lo que cualquier madre puede esperar de un control rutinario del embarazo también integra este capítulo. En ese marco, se ofrecen sugerencias de no ingerir alcohol, drogas, fumar tabaco y ser cuidadosa con los medicamentos, así como la importancia de una alimentación variada y suficiente.
Para desterrar mitos, el material también indica que las relaciones sexuales no están contraindicadas en el embarazo, salvo que exista un riesgo o algunos síntomas como sangrado o fuertes dolores, en cuyo caso se sugiere consultar con la ginecóloga o ginecólogo.
Si todo el embarazo es un proceso de expectativa, dudas, alegrías, y ansiedades, el climax de estas sensaciones se da cuando se aproxima el parto. La Guía se ocupa de recomendar a los padres qué llevar al hospital, para estar tranquilos y cómodos para esperar ese momento.
¡Llegó!!!
Después de tanta espera el bebé nació. Las madres, los padres y las familias en general se ven transformadas. Por eso el segundo capítulo de esta guía propone consejos sobre la lactancia, enseña posiciones para evitar dolores corporales a la madre y garantizar la comodidad del niño; mitos que van desde la supuesta relación entre el tamaño de los pechos y la cantidad de leche, pasando por la existencia de madres que no producirían leche, hasta una relación directa entre el humor de la madre y la incapacidad de amamantar, son desterrados por este material que propone valorar la leche materna y el vínculo que el amamantamiento promueve. Se sugiere iniciar al lactancia en la primera hora del nacimiento, en consonancia con las recomendaciones de UNICEF y la OMS.
Los primeros controles médicos que reciben los bebés son fundamentales: las posibles señales de alarma de los primeros días, una fuente de ansiedad en las familias, están explicadas con claridad para fomentar una alerta que no angustie: estar atentos a la fiebre, la hipotermia, el rechazo a la alimentación, las dificultades para respirar o los cambios de color en la piel son algunos de los consejos.
Entre los cuidados iniciales, la prevención del contagio de bronquiolitis se lleva un apartado importante. Los bebés recién nacidos son vulnerables y cuidarlos requiere de atención en varios aspectos: mantener los ambientes ventilados, lavarse las manos con frecuencia, cuidarse de no estornudar cerca de los niños, no exponerlos al humo de cigarrillo y evitar que se expongan a personas enfermas son algunos fundamentales.
0 a 3 meses
En los primeros tres meses de vida los bebés aun no se sientan ni sostienen su cabeza, por lo tanto suelen estar en brazos o acostados sobre colchones firmes y sin almohadas.
El riesgo de ahogarse en la bañadera o mientras duerme, se recomienda no dejar solo nunca a un bebé de menos de 3 meses, y no sobre abrigarlo.
Las vacunas quíntuple, contra la polio, contra el rotavirus y contra el neumococo son las primeras inmunizaciones que reciben los bebés.
De 4 a 6 meses
Una vez pasado el primer trimestre, los bebés se mueven más que antes y cerca de los 6 meses pueden darse vuelta. Es el momento de comenzar a conocer el mundo desde nuevas perspectivas y los riesgos de caída aumentan. Enchufes, braseros, elementos cortantes o pequeños deben estar alejados de los bebés.
La leche materna sigue siendo la alimentación exclusiva que el bebé necesita. Tomar hierro todos los días se recomienda hasta el año y medio, y en este período se indica la segunda dosis de las vacunas iniciales.
De 6 a 9 meses
Los bebés comienzan a ingerir alimentos sólidos, se sientan, se mueven y son muy curiosos. Se arrastran y algunos a los 9 meses gatean. Es tiempo de acompañarlos con juegos con objetos variados y livianos.
Este trimestre es el tiempo de la tercera dosis de la vacuna quintuple, contra la polio y las dos primeras dosis de la antigripal
De 9 a 12 meses
Las madres, padres y familiares cercanos o personas que se ocupan de cuidar a los chicos se dan cuenta que en esta etapa ellos se asustan con los desconocidos. Las recomendaciones indican ser pacientes y cariñosos para transmitirles seguridad y confianza.
En este periodo alcanzan nuevos niveles de autonomía: de a poco beben solos y se expresan cada vez más. Es importante desarrollar la paciencia cuando protestan por las cosas que no les gustan.
Cerca del año de vida muchos se paran y hasta intentan caminar. La guía sugiere no apurar a los chicos en este proceso, porque necesitan sentirse cómodos y seguros para hacerlo.
El primer cumple!
Seguramente al celebrarse un año del nacimiento, la familia celebra y se emociona rememorando los avances del niño o la niña. Tener a mano la Guía, con los cuidados y recomendaciones básicas de crianza, ayudará a prevenir accidentes y enfermedades, ya disfrutar a pleno el desarrollo y crecimiento de nuestros hijos.
Descargar la guia:
http://msptucuman.gov.ar/wordpress/wp-content/uploads/2016/10/Del-embarazo-a-los-11-a%C3%B1os-GUIA-PRACTICA.pdf
