Niños y niñas comparten la pasión por el fútbol
El sábado 6 de mayo comenzó el torneo infantil de futbol Campeones de la vida en la facultad de Educación Física de la UNT. En el primer encuentro disputaron Paso a Paso contra los locales Guacamayos. Durante la mañana se realizaron varios partidos simultáneos, por categorías.
Salvador, profesor de Educación física y coordinador de Guacamayos contó que entrenan chicos de “4 a 14 años, para inculcar valores a partir de experiencia y volcarla en la vida cotidiana. Hoy comienza el torneo con 18 escuelas de la misma categoría y se llama Campeones de la vida, todas escuelas formativas. La idea es que sea inclusivo y todos jueguen. No proponemos considerar a los rivales como enemigos sino compartir la experiencia con ellos. Nosotros creemos que el deporte enseña compañerismo, pertenencia, tratar de ser buenas personas y volcar en la cancha el ser ordenados, compañeros y también llevar a esos valores a la vida cotidiana”.
En varios de los grupos de la escuela Paso a paso se incluyen niñas que comparten con los varones los entrenamientos y partidos. Lujan, arquera de Paso a Paso fue acompañada por sus padres y principales hinchas, que alentaban desde atrás del arco. Cecilia, mamá de Luján, contó “nunca me imaginé que a ella le guste el fútbol, la he llevado a patín, hockey. Las cosas que le pueden gustar a una nena, pero se decidió por el fútbol y ahí está, ahí la ves. Porque a mí me gusta que haga lo que ella quiere no lo que yo creo que tiene que hacer. Acá en Paso A PASO ella se siente integrada, es la única nena, pero ella está adaptada, la pasa bien cuando juega y entrena”.
Alejandro González, también tiene una hija jugadora, no arquera, sino defensora en otra categoría de Paso a paso, “es una emoción muy grande porque la quisimos mandar a varios deportes pero ella no quiso, solo le gusta el fútbol”.
Aunque la preocupación por el trato diferencial por su condición de mujer, pesa. Uno la ve bajo los tres palos y es una jugadora más, pero atrás hay una historia de prejuicios que nos atraviesa como sociedad. Según Cecilia “ella no es discriminada salvo en algunos casos. Los padres de los otros chicos la piden a ella para arquera y cuando no puede venir están preguntando qué pasa con Lujan que no viene, y la verdad que Luján la pasa bien y le gusta”.
Alejandro agregó con convencimiento “las mujeres también juegan al fútbol, no hay que ser machista. A mí me encanta cuando puedo si compartir con ella, darle consejos, charlo con ella sobre lo que le gusta y siente cuando juega. Ella está integrada el equipo y todos la tratan bien”.
Y para cerrar Cecilia, como mamá orgullosa se permitió soñar en público “Luján quiere jugar en Atlético, es fanática, espero que algún día se le dé. Para que esos sueños se puedan cumplir influye mucho la sociedad, hoy estamos más cerca de la igualdad de condiciones con el varón y hacemos cosas que antes hubieran sido imposibles. Se están superando los prejuicios”.
Los entrenamientos se realizan los martes y jueves de 19 a 20.30 en la facultad de Educación Física de la UNT, Benjamin Araoz al 800, y los partidos los sábados por la mañana.
