La educación de las niñas, niños y adolescentes, un gran interrogante que acecha a la Argentina
Los niños tienen derecho a la educación. Es uno de los 10 Derechos fundamentales de los niños redactados en la Declaración de los Derechos del Niño en 1959 en la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobara la Convención sobre los Derechos de los Niños. Lamentablemente, esos derechos de los que todo niño debe disponer, no siempre se cumplen.
Todos los niños tienen derecho a una educación. La educación no consiste únicamente en aprender a leer y escribir, sino que constituye la base del desarrollo personal. Para que el engranaje de una sociedad funcione, sus miembros tienen que tener una educación básica que les permita desarrollarse como individuos para poder convivir en sociedad.
A pesar de la importancia de la educación, hay millones de niños en todo el mundo que no pueden acceder a ella. Por eso resaltamos este Derecho de los niños a la educación, al acceso a la educación sin discriminación de ningún tipo y a una educación gratuita para niños y niñas. Porque todos los niños tienen derecho a aprender y porque la educación será su mejor herramienta para construirse una vida digna.
En Argentina, desde 2006 la Ley de Educación Nacional 26.206 establece que todos los niños y adolescentes deben recibir 14 años de educación obligatoria. Si bien hubo avances en términos de cobertura, aún persisten brechas significativas en el acceso a la educación, en las trayectorias escolares y en los aprendizajes de los niños y adolescentes.Existen grandes disparidades en la probabilidad de ejercer el derecho a una educación inclusiva y de calidad, en función del origen social y económico, del género, del lugar de residencia –zonas urbanas versus rurales – y la provincia de procedencia. Persisten, además, grandes diferencias entre las distintas jurisdicciones en torno a la inversión y gestión educativa.
Cerca de 650.000 niños y adolescentes de entre 4 y 17 años están fuera del sistema educativo, de acuerdo al último Censo Nacional. De ellos, aproximadamente medio millón son adolescentes. En contextos rurales, 34% de los adolescentes de 15 a 17 años está fuera de la escuela: 93.000 adolescentes, de los cuales 65.000 pertenecen a contextos rurales dispersos.
Fuente: Observatorio Argentino por la Educación.
En primaria no se registraron grandes cambios. La cobertura sigue siendo cercana al 100%. Casi todos los chicos en edad de primaria van a la escuela. Donde sí hubo avances significativos fue en el nivel inicial. La matrícula entre los 3 y los 5 años creció un 66,9% entre 1996 y 2018 y tres de cada cuatro chicos asisten al jardín de infantes. En el país la escolaridad es obligatoria a partir de los 4 años pese a que hubo intentos de extenderlo a partir de los 3.En secundaria también se advierten mejoras. Entre 1996 y 2017, la matrícula en el nivel aumentó un 35,6%. No obstante, pese a ser obligatorio desde 2006, todavía unos de cada diez adolescentes están afuera del sistema. Al mismo tiempo, a diferencia de lo que sucede en primaria donde se mantiene estable, en secundaria la cantidad de alumnos cae a medida que pasan los años. En 2017 había 850.827 estudiantes en primer año y solo 454.520 en quinto o sexto.
En una entrevista con la Licenciada/Profesora en Ciencias de la Educación, Noelia Juárez Prat, quien se desempeña Ministerio de educación la cual se encuentra a cargo de la Coordinación en el área de niñez. Al cabo de una serie de preguntas, referidas a los derechos a la educación de los niños, niñas y adolescentes nos pudo responder lo siguiente:
¿Cómo definirías a los derechos del niño a la educación?
-Antes que nada, los derechos de niños, niñas y adolescentes tienen su origen en la convención de Niñez y Adolescencia. Esta convención tiene como objetivo dejar atrás la conceptualización de niños y niñas como objeto, para pasar a ser sujetos de derecho, al igual que una persona adulta. Los derechos son inalienables, cada persona nace con esos derechos y por ende nadie se los puede quitar en ninguna circunstancia.
En particular, los derechos a la Educación puedo definirlos desde lo legal como un conjunto de normativas con la que tiene que cumplir el Estado, el cual tiene la responsabilidad de cumplirlas y garantizarlas, para proteger y asegurar que cada niñx ingrese a la escuela, permanezca y egrese y por supuesto dentro de una educación inclusiva y de calidad.
¿Por qué necesitan los niños la educación?
-Desde el punto de vista convencional y normativo, lxs ninxs necesitan la educación para insertarse en un sistema laboral, tener asegurada una vida y una infancia digna. El derecho de la educación para todos los niños y las niñas no está orientado únicament a dotarles de las herramientas básicas como leer y escribir, sino también a dotarles de los valores necesarios para que puedan participar activamente en la sociedad como miembros de pleno derecho. Como sabemos, cualquier ninx que está excluido delsistema educativo corre riesgos de permanecer excluido del sistema y llevar una vida marginal.
En cuanto a las políticas de educación ¿Se implementa correctamente en Argentina? ¿Todos y todas tienen acceso a ella?
-Según la ley de educación 26.206, todos los niños, niñas y jóvenes tienen la obligación de ingresar al sistema educativo, pero esto no se refleja en la realidad. La educación es gratuita, publica y obligatoria, pero en vez de ser inclusiva, es excluyente. Con esto, me refiero a que el Estado no regula la educación de manera correcta, ya que no se preocupa por la permanencia y el desarrollo estudiantil en tiempo y forma. Si bien durante el gobierno Kirchnerista se trató de brindar herramientas como la Asignación Universal por Hijo para que las clases mas vulnerables puedan acceder a la educación, y a si mismo como una forma de mantener esa asistencia por el hecho de que la madre debía presentar un documento donde conste el ejercicio del niñx dentro del sistema escolar.
Pero esto duró poco, ya que el Servicio Asistencial Social Educativo (SASE) no está cumpliendo actualmente con lo que debería, porque cuando se efectúan denuncias sobre el riesgo pedagógico de algunxs ninxs en zonas rurales, no interviene en estas situaciones para la reintegración de estos. En definitiva, que no se implementa correctamente en Argentina.
Actualmente ¿Cómo ves el sistema educativo en Argentina?
-Lo veo desigual. Quizás no se nota tanto esa desigualdad en las zonas más urbanas, pero en los barrios de bajos recursos o en zonas más vulnerables si. Se podría decir que baja la calidad enseñanza en esas zonas porque no se espera tanto de esos estudiantes.
Los contenidos son menos, están descontextualizados, no se sigue los lineamientos curriculares, no están las mismas pautas que en otras escuelas de zonas urbanas. También, en cuanto a la calidad, lo que concierne a lo que es el ingreso, la permanencia y el egreso, también hay bastante desigualdad. Muchos chicos de escuelas rurales abandonan y no hay medidas de reinserción, es es la realidad. Durante los primeros años de los Kirchner se aumentó mucho la calidad educativa en lo que concierne a las zonas rurales, pero actualmente volvió a caer. Dado que en la actualidad no hay un presupuesto estable que logre cubrir todas las necesidades del sistema educativo a lo que termina perjudicando la calidad del ejercicio de derecho de todxs lxs niñxs, concluyo.
Los niños, adolescentes y jóvenes en edad escolar obligatoria (de 4 a 17 años) que concurren hoy a escuelas argentinas no aprenden lo que debieran (desde hace más de una década, la mayoría de los menores no termina la educación obligatoria señalada y, de entre aquellos de 15 años que sí están en el aula, más del 50% no comprende lo que lee). La Argentina padece de una vergonzosa desigualdad educativa: dependiendo del lugar de nacimiento y de residencia, nuestro país tiene diferentes resultados educativos, lo cual quiere decir que si a un niño le tocó en suerte nacer e ir a la escuela en Catamarca o en Santiago del Estero, obtendrá una educación de calidad netamente inferior que aquel que reside en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o en Córdoba (así lo indican los resultados promedio de las pruebas APRENDER 2017/18 de las jurisdicciones referidas).
Fuente: Observatorio Argentino por la Educación.
Según Unicef, las dificultades vinculadas al acceso, permanencia y terminalidad de la secundaria, este nivel educativo presenta desafíos sustantivos para garantizar aprendizajes: según resultados de evaluaciones nacionales, 7 de cada 10 adolescentesque cursan el último año de la secundaria tienen un desempeño bajo en matemáticas, y sólo la mitad alcanzan niveles de desempeño satisfactorios o avanzados en lengua. En la educación actual Argentina, se debe reconocer el problema y no minimizarlo.
Abstrayéndonos por ahora de las causas, es importante que asumamos que estamos en “emergencia educativa”, tal como establece el art. 110 de la Ley 26.206: el riesgo de no educar ya pasó de ser un riesgo para convertirse en realidad, y la Ley de Educación Nacional que, desde hace más de una década, garantiza “las condiciones materiales y culturales para que todos los alumnos logren los aprendizajes comunes de buena calidad independientemente de su origen social, radicación geográfica, género o identidad cultural” no se cumple (entre otras muchas que tampoco se cumplen).
El Estado debe garantizar las políticas y las instituciones necesarias para protegerlos y revertir la situación de extrema vulnerabilidad en la que se encuentran a través de una estrategia integral que incluya, al menos; la garantía de un ingreso básico y el acceso a servicios de educación y cuidado de calidad. El desarrollo de las políticas se encuentra en la designación del Defensor del Niño un correlato fundamental. Esta figura, vacante hace más de una década, tendrá la responsabilidad de monitorear el cumplimiento de los derechos de los niños, niñas y adolescentes y de promover las articulaciones necesarias para garantizarlos. Los niños y niñas ya no pueden esperar más.
Fuentes:
Observatorio Argentino por la Educación.
https://www.unicef.org/argentina/que-hace-unicef/educaci%C3%B3n
https://www.educ.ar/recursos/117951/sistema-educativo-argentino-aspectos-generales
