Dignidad en Tucumán: ¿Derecho o posibilidad?
La UCA publicó su informe “Derecho al hábitat digno en la infancia”, el cual revela que nuestra provincia presenta una de las condiciones de vida más precarizadas del país.
Hace unos días se conocieron los resultados del Observatorio de la Deuda Social de la Pontificia Universidad Católica Argentina, sobre el derecho a una vivienda digna en la infancia. El mismo es un programa de investigación destinado a visibilizar aquellos factores del entorno edilicio que pueden repercutir en el normal crecimiento de los niños y que, además, reveló datos preocupantes con respecto a la realidad social que vive nuestra provincia con respecto al desarrollo de niños, niñas y adolescentes.
Queriendo comprender mejor estas estadísticas y su verdadero objetivo, mantuvimos una ardua charla con el licenciado en Trabajo Social, Gustavo Gramajo, quien actualmente se desempeña en el Poder Judicial de la Tucumán, en el “Registro único de postulantes a la adopción” y en el gabinete multifuero. Además, es profesor adjunto de la cátedra de “Animación sociocultural” de la carrera de Trabajo Social, en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán.
Para Gramajo, este informe “es relevante para comprender las inequidades en el desarrollo humano y social” y cree que brega por el cumplimiento de la Ley 26.061, de Protección Integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, en donde además, recuerda, tiene un papel fundamental no solo los biene materiales, sino también “la familia como centro de vida que tiene que ser para el o la menor”. Al tiempo que considera que “los resultados evidenciados, tienen que hacernos ruidos a los tucumanos y las tucumanas porque estos números obtenidos parecieran reflejar que nuestra provincia vive otra realidad con respecto al resto del país”.
La preocupación del licenciado en Trabajo Social es entendible cuando se observan los resultados del muestreo realizado por la UCA. Solo por citar algunos ejempos, Tucuman es el aglomerado urbano más contaminado entre los muestreados. Tres de cuatro niños viven cerca de al menos un contaminante del medio ambiente. A su vez, encabeza el podio del déficit de servicios barriales y públicos, como así también es el conglomerado con el mayor déficit de vigilancia policial, llegando a casi el 80%.
Por un lado, 4 de cada 10 niños se sienten inseguros dentro se su vivienda. Por otro, la inseguridad en la calle alcanza un monstruoso 90%. En lo que a infancias tucumanas en regiones urbanas respecta, es la provincia más afectadas del país en cuanto al acceso a una infraestructura básica de vivienda. El 65,4% de ellas presentó algún déficit al respecto.
“Si todos estos números solo nos siguen pareciendo eso, entonces en algo nos estamos equivocando. Tucumán posee una deuda social muy grande con las infancias y juventudes de sus ciudadanos, y si no lo revertimos, nuestres niñes y adolescentes nunca llegaran a dar paso en lugares institucionalmente concebidos, como la escuela o la facultad, con una que les brinde la posibilidad, como sujetos que son, de ser sujetos en sí mismo y poder desarrollarse con autonomía”, sentencia Gustavo.
Trabajo completo de la Pontificia Universidad Católica Argentina en su pagina web, www.uca.edu.ar.
